Esta es una pregunta que nos hacemos con bastante frecuencia.
Tenemos muy interiorizado el hecho de ir al médico o al fisioterapeuta cuando algo nos duele físicamente, sin embargo esperamos a ir al psicólogo hasta el el dolor psicológico es insoportable.
Y claro…no es lo mismo acudir al médico cuando la sesión está comenzando que cuando se ha extendido a otras áreas corporales.
Nuestros pensamientos, sentimientos y acciones están muy determinadas por lo que nos llega de nuestra cultura y familia. Nuestro punto de vista es bastante reducido. Tenemos un número limitado de herramientas de base para afrontar los conflictos y en ocasiones, alguno se nos puede atragantar.
Como sólo tenemos nuestro punto de vista, nos cuesta mucho creer que la psicología nos pueda ayudar. Parece que si yo mismo no puedo ayudarme ¿cómo lo va a hacer alguien de fuera?
La psicología estudia muchos puntos de vista, muchos errores comunes de pensamiento y conducta, es una ciencia que lleva años y años recogiendo la sabiduría de un gran número de psicólogos e incluso de filósofos y culturas para convertirlo en conocimiento científico y práctico del que muchas personas se pueden beneficiar.
No hace falta «estar fatal» para ir a terapia. De hecho lo mejor es acudir cuando algo se te está empezando a ir de las manos, o incluso para prevenir situaciones con riesgo como por ejemplo, el nacimiento del primer hijo, inicio de quimioterapia, jubilación mal tolerada, etc. El autoconocimiento y la apertura a otros puntos de vista siempre, SIEMPRE, te aportará plenitud, independientemente de que te encuentres bien o mal. La consciencia y la apertura mental siempre te harán más libre ya que dejarás de ser un autómata de tu pasado y de tu contexto.
Aun así, siempre serás bien recibid@ en mi consulta psicológica, ya sea con terapia individual, de pareja o grupal.
En este mundo en el que vivimos creo que se necesita más que nunca de personas que te escuchen y que te guíen para no caer en la desidia, el desánimo, la apatía, la ansiedad, etc.
Unos por una situación delicada, sin empleo y con necesidades básicas que no consigue cubrir. Otros por el estrés que le provoca la situación laboral y el miedo a la pérdida del empleo. Otros por que viven en una dinámica que les impide disfrutar de las cosas importantes y que se sumergen en un mundo vacío donde no hay felicidad, ni alegría, ni amor,……..
Creo que sois muy necesarios y hacéis mucho bien. Gracias
Hola Antonio,
Muchas gracias por tu comentario. Evidentemente las intervenciones psicológicas cambian mucho dependiendo de las circunstancias en las que se mueve cada paciente. Es cierto que la salud mental es responsabilidad de todos. Me explico, las políticas de salud tienen que ver mucho con esto porque no es lo mismo estar con o sin empleo, con o sin atención sanitaria, con o sin espacios verdes o comunitarios, trabajar 7 horas o 14… Aun así, la situación siempre es mejorable. Aun así, la parte personal y el contexto social inmediato tiene muchísimo que ver con la salud mental de las personas. De ahí la importancia de trabajar con la persona y, en muchas ocasiones con la familia, pareja e incluso otras instituciones.
Un saludo y que tengas un feliz día.